Vistas desde un velero de los delfines en su hábitat natural.

Avistamiento de cetáceos en velero por el sur de Tenerife

Duración
3 h aprox.

Cancelación gratuita hasta el último minuto

Desde

55 €
Elige la fecha, hora y asistentes

Detalles

  • Duración:
    3 h aprox.
  • Nivel de la actividad: 1/5 Nivel bajo
  • Esta actividad no es apta para personas con movilidad reducida
  • Actividad no apta para carros o sillas de bebé
  • Mascotas no permitidas
  • Bono digital. No es necesario que lleves tu reserva impresa
  • Punto de encuentro:
    Puerto de Colón.

Qué incluye

  • Paseo en velero y avistamiento de cetáceos.
  • Parada en la bahía para hacer snorkel.
  • Avistamiento de tortugas.
  • Práctica de snorkel ( 30 minutos).
  • Sándwich y tres bebidas.

Cancelaciones

  • Cancelación gratuita. Puedes cancelar en cualquier momento antes del inicio de la actividad. Si llegas tarde o no te presentas, no se obtiene ningún reembolso.

¿Qué harás?

Tres horas navegando por el sur de Tenerife, pero no como lo imaginas. No es un catamarán lleno, ni un paseo con prisa. Es un velero. Uno de los que aún escuchan al viento.

Desde el puerto zarpa el grupo, reducido, con espacio para moverse y mirar. Máximo 11 personas, que no es un número al azar: permite atención personalizada, silencio cuando toca, y conversación cuando apetece.

El capitán, experto tanto en navegación como en cetáceos, irá marcando el rumbo. Esta zona es un corredor natural para delfines y calderones tropicales. A menudo se dejan ver, nadando cerca del barco o saltando a lo lejos. También es posible cruzarse con tortugas marinas, deslizándose bajo la superficie.

No es un acuario. No hay certezas. Pero sí hay un profundo respeto por el entorno, por los tiempos de los animales y por el privilegio de poder observarlos sin perturbarlos.

Después de ese primer contacto con la fauna, el barco se acerca a una bahía escondida. Solo se llega por mar. Agua limpia, calma, y tiempo para un baño o snorkel. El equipo está incluido. El silencio, también.

A bordo, te esperan tres bebidas frías y un sándwich. Algo sencillo, pero perfecto cuando el mar te envuelve y lo único que apetece es mirar alrededor. Proa, sol, y esa sensación de no tener nada pendiente.

En el regreso, la costa muestra otra cara. Calas ocultas, acantilados oscuros, vegetación que parece colgar del cielo. El barco va bordeando rincones que solo conocen los que navegan aquí cada día.

Y cuando llegas al puerto, sabes más. No solo sobre delfines o navegación. También sobre esta isla que, desde el mar, se entiende mejor.

Elige cuándo. Tenerife ya está lista para recibirte.