El Cabo de Gata se encuentra en la provincia de Almería, en el extremo suroriental de la península ibérica. Forma parte de un parque natural marítimo-terrestre que protege tanto la línea de costa como el interior volcánico. Su mayor singularidad es precisamente ese origen volcánico, visible en los acantilados, calas y formaciones rocosas que se adentran en el Mediterráneo. A esto se suma un clima desértico, con escasas lluvias al año, que crea un paisaje único en Europa. El resultado es un entorno de contrastes: playas vírgenes, dunas, salinas y pequeños pueblos blancos que conservan el carácter tradicional del litoral almeriense.
