Detalles
Qué incluye
- Entradas incluidas
- Guía experto en español
- Autobús con aire acondicionado
Qué no incluye
- Comidas y bebidas
Cancelación gratuita hasta 3 días antes
Desde
Punto de salida
Recogida en pleno centro de la ciudad. No necesitarás brújula: todo está organizado. Tú no te olvides la cámara, del resto nos ocupamos nosotros.
Visita guiada y tiempo libre
La excursión empieza en la superficie, pero rápido bajarás las escaleras. A más de 100 metros bajo tierra, descubrirás túneles, esculturas, la Capilla de Santa Kinga, y lagos esmeraldas mientras el guía comparte curiosidades. Salas decoradas con esculturas y bajorrelieves que narran la evolución de la minería.
Fin de la experiencia
Subida a la superficie. Vuelta a Cracovia con un poco de polvo mágico en los zapatos.
Aunque al principio no lo parezca, a pocos kilómetros de Cracovia se encuentra un lugar inesperado: las minas de sal de Wieliczka. Declaradas Patrimonio de la Humanidad, en cuanto comienzas a descender, entiendes por qué la UNESCO las eligió.
Bajarás más de 100 metros para descubrir un mundo subterráneo que parece sacado de la novela Viaje al centro de la Tierra de Julio Verne: túneles infinitos, esculturas de sal, capillas talladas en la roca y lagos de aguas esmeralda.
Durante el recorrido, un guía especializado irá desvelando historias curiosas sobre los mineros, los métodos de extracción, e incluso sobre las leyendas que todavía hoy se siguen escuchando. eso, quieras o no, le da al sitio un aura muy especial.
Es ese equilibrio entre lo que construyó el ser humano y lo que la naturaleza fue esculpiendo poco a poco lo que realmente sorprende.
No se incluye comida en la mina. Puedes llevar algo para picar durante el recorrido o comer antes o después de la visita.
Sí, hay muchos escalones (unos 800) y pasillos bajo tierra para recorrer.
Aun así, es recomendable llevar algo para la lluvia durante el tiempo que estés fuera.
Las fotos de los viajeros
La mina de Wieliczka está en funcionamiento desde el siglo XIII. Es una de las más antiguas del mundo y guarda maravillas como la Capilla de Santa Kinga, tallada por mineros… ¡en sal! Incluso el altar y los bajorrelieves, como el de La Última Cena, están esculpidos en este mineral.