Es uno de los mayores símbolos del arte islámico en Europa y un testimonio excepcional de la historia de Al-Ándalus. Su construcción comenzó en el siglo VIII y fue ampliada en sucesivas etapas hasta convertirse en una de las mezquitas más grandes del mundo en su época. Tras la conquista cristiana en el siglo XIII, se añadió una catedral gótica en su interior, lo que la convierte en un monumento donde conviven dos tradiciones arquitectónicas.
